Es común que a la hora de arrendar una vivienda (ya sea casa o departamento), en el contrato esté estipulado el pago de una garantía, que en la mayoría de los casos es equivalente a un mes de la renta.
Dicho monto tiene por objetivo dar un resguardo al propietario de la vivienda ante cualquier daño que pudiese ocasionar.
Ahora, si el arrendatario devuelve la casa o departamento sin deterioros, no debiese tener ningún problema para recibir su dinero de vuelta. Sin embargo, existen reclamos de usuarios que no se les devuelve el dinero o que hay retraso en el pago.
A continuación te entregamos algunos consejos para evitar estas situaciones.
1. Asegurar la recepción de documentos
Frecuentemente, la garantía es utilizada para pagar las últimas cuentas de servicios básicos y gastos comunes. Por ello, es recomendable revisar que la contraparte haya recibido todos las boletas.
2. Chequear los plazos
El plazo de la devolución del mes de garantía comienza a regir desde que se entregan las llaves de la vivienda y no antes. De cualquier forma, el contrato debería estipular una fecha, que normalmente es de 60 días.
3. Fijar tarifas en el contrato
En el contrato deberían estar fijadas las tarifas y los cálculos en caso de reparaciones, para que así estén en conocimiento de ambas partes.
4. Realizar un inventario
Antes de comenzar a vivir en la propiedad arrendada, es bueno realizar un inventario in situ el día de la entrega de llaves. Allí se deben incluir todas las observaciones, se adjuntan fotos del estado de la propiedad obtenidas en el mismo acto y se respalda todo de forma electrónica.
5. Respaldar con imágenes
Antes de abandonar la vivienda, es recomendable tomar fotografías que respalden el estado de entrega de la misma, para así comparar con el inventario mencionado en el punto anterior.
Además, si es que existe la tarifa de aquello en el contrato, se puede calcular inmediatamente el valor de las reparaciones a descontar.
6. Buscar asesoría profesional
Existen empresas dedicadas a la administración de viviendas, así como asesores experimentados, como los que encuentras en RE/MAX Capital, que establecerán condiciones contractuales de arrendamiento ajustados a la norma y de conveniencia y claridad para ambas partes.
A partir de esto se podrá establecer con mayor rigurosidad los requisitos y conductos regulares para trámites como la devolución de la garantía. Se definen qué cargos corresponde descontar (como los de mal uso) y cuáles no (como daños estructurales, por ejemplo).
Así, al tener un respaldo del momento previo al uso de la vivienda y otro posterior, no debiese existir mayor duda a la hora de hacer valer el contrato. De lo contrario, dichas pruebas también serían de utilidad a la hora de -eventualmente- acudir a la justicia.